CONTRACAMPAÑA DE ZEFERINO - RCC

Fecha de Publicación:
Acapulco de Juárez, Gro. Méx. 4 Octubre 2010

Dir. Revista Virtual LEMA Universitario:
Emilio Nahín Rojas Madero
"Mi vida por una mejor Nación:

Contracampaña de Zeferino
Roberto Camps Cortés

El gobernador Zeferino Torreblanca Galindo, al insertar en la agenda mediática sus peculiares consideraciones sobre la decisión que han tomado los perredistas de respaldar la candidatura del senador con licencia Angel Aguirre Rivero, lleva el claro propósito de influir en el segmento del electorado que no tiene simpatías por ningún partido político. Zeferino hace de esta manera, una abierta contracampaña de la cual los principales beneficiarios son Rubén Figueroa Alcocer, René Juárez Cisneros, y el candidato del PRI-PVEM-PANAL, Manuel Añorve Baños.

Aunque el gobernador invoque su derecho a expresarse con libertad, no es aplicable esta lógica, Zeferino Torreblanca no es un ciudadano común: tiene acceso garantizado a los medios de comunicación con los que tiene convenios publicitarios, y por su forma estridente de declarar, también se inserta con facilidad en donde no paga.Zeferino tiene grupo político y es jefe de la administración pública estatal, de las fuerzas de seguridad, y tiene un liderazgo menguado pero liderazgo al fin ante la sociedad civil, a quienes de manera deliberada “tira línea” de rechazo a la coalición Guerrero nos Une.

El tono del lenguaje que utiliza, tensa el escenario, y genera lo que se llama en análisis de medios, una situación de crisis. Seguramente hay efectos por lo que declara el gobernador, pero uno de ellos sin duda, es la autodestrucción. La forma suigéneris en que ha practicado su “política política” lo llevó a confrontarse con grupos sociales y políticos, y un gobernante que abandona el vínculo con la sociedad que lo llevó al poder, ha perdido legitimidad, y esto ocasiona que su actuación política sea corrompida. Gobernar como autócrata, y autoreferenciarse es lo que menos esperábamos de un hombre que desde la Coparmex, parecía ser una punta de lanza de la democratización de Guerrero, yo al menos así lo creí. Pero el poder que se sustenta en el ejercicio de una autoridad deslegitimada, es el ejercicio de la antipolítica. Eso es lo que nos ha dado el gobernador en su sexenio, quizá sí de obras buenas para Guerrero, porque no podríamos negarlo. Pero como conductor de la vida de la entidad, y armonizador de los esfuerzos ha sido un fiasco, y como muestra está el fracaso del proyecto La Parota.

Pero volviendo al inicio de este artículo. Creo que si el gobernador pretender marcar agenda de esta manera, debe uno suponer que existen acuerdos soterrados con Juárez Cisneros y Figueroa Alcocer, con cuya venia habría llegado a la gubernatura y que ahora pretende devolverles la cortesía. Y si, como ya ha trascendido, es verdad que Torreblanca Galindo impulsa la llegada de Rafael Acevedo Andrade a la titularidad de la Auditoría General del Estado (AGE), la serpiente se muerde la cola cerrando el ciclo de acuerdos secretos. Acevedo Andrade está involucrado con un fraude que supera los mil 600 millones de pesos del Plan de Previsión Social (PPS), y que habrían sido desviados en el periodo de René Juárez Cisneros, con el primero como secretario de Finanzas.

Todos recordamos la campaña proselitista de Zeferino Torreblanca, quien ofrecía sacar a las ratas de Casa Guerrero, pero argumentando que en el PRD no hay cuadros de valía, decidió entregar la conducción del turismo a un empresario priista de la zona dorada, vaya, la iglesia en manos de Lutero; la conducción de los asuntos políticos, a un priista ex alcalde de Acapulco y ex rector de la UAA. La dirección de la televisora estatal, a un gris sujeto sin experiencia en la comunicación, e identificado con el PRI. A Zeferino le tocó perder la mayoría de ayuntamientos perredistas, diputados locales y federales. Así que las malas cuentas políticas que entrega dejan sin efecto la fingida reflexión que muestra a punta de mandarriazos contra el partido que todo le dio.

Mejor sería que en los cuarteles de la campaña de la Coalición Guerrero nos Une, no se enganchen en el lenguaje de diatriba que plantea el gobernador. Será mejor que no le hagan caso. Mejor sería analizar el aporte que le ha dado este hombre a Guerrero, más allá de la difícil situación emocional que atraviesa y lo hacen ver desfigurado y con el espíritu alterado, aún creo que Torreblanca Galindo cumplió con un papel decoroso en su administración, y se debe reconocer para que no haya retrocesos. Al final será la propia ciudadanía quien lo calificará. Más allá de lo que dice El Universal, en el sentido de que está reprobado. No creo como le dijeron, que su gobierno sea fallido. Mas bien tuvo mucha administración, (no calificaría sus resultados aún) y poca, o nula política.

Comentarios:
mojojojo_1964@hotmail.com

NOTA: Los comentarios aquí vertidos son exclusivamente de quen los firma.